- Contrato de 9.700 millones de dólares por cinco años con un prepago del 20%.
- Acceso de Microsoft a GPUs NVIDIA GB300 y despliegue por fases hasta 2026 en Texas.
- Centros de datos con refrigeración líquida y soporte de 200 MW de carga crítica (Horizonte 1-4).
- Acuerdo adicional con Dell por 5.800 millones para GPUs y equipos; financiación mixta.
Microsoft ha cerrado un contrato plurianual con IREN Limited para reforzar su infraestructura de inteligencia artificial en la nube, un movimiento que subraya la competición por capacidad de cálculo a gran escala en el sector. El acuerdo asciende a aproximadamente 9.700 millones de dólares y consolida a IREN como proveedor de referencia de cómputo GPU para cargas de trabajo de IA.
El pacto contempla cinco años de vigencia, un pago anticipado del 20% y el acceso de Microsoft a clústeres de GPUs NVIDIA GB300. El despliegue se realizará de forma escalonada hasta 2026 en el campus de IREN en Childress (Texas), un emplazamiento de 750 MW que incorporará nuevos centros de datos refrigerados por líquido y soportará 200 MW de carga crítica de TI en sus primeras fases (Horizonte 1-4).
Detalles del contrato y alcance
Según la comunicación corporativa, IREN prestará servicios de nube GPU y facilitará a Microsoft el acceso a aceleradores NVIDIA GB300 durante todo el periodo contractual. La naturaleza del acuerdo está orientada a entrenamientos e inferencias de modelos de IA de última generación, integrados en la oferta de nube del gigante tecnológico.
La estructura económica incluye un prepago equivalente al 20% del importe total, que refuerza la liquidez inicial del proyecto y alinea incentivos para acelerar la disponibilidad de capacidad. En términos europeos, la operación se sitúa en torno a 8.419 millones de euros al cambio indicado en los comunicados de prensa.
El calendario prevé un despliegue por fases hasta finales de 2026, con hitos de capacidad definidos en el plan Horizonte 1-4. Este enfoque permite ajustar la entrega de infraestructura al ritmo de la demanda de IA y a la puesta en marcha progresiva de los nuevos módulos de data center.
Infraestructura: campus de Childress y refrigeración líquida
El campus de Childress dispone de 750 MW de capacidad y se adaptará para alojar instalaciones de alto rendimiento con refrigeración líquida, una tecnología clave para mantener la eficiencia térmica en entornos densos de GPU. Esta modernización es vital para sostener cargas intensivas propias del entrenamiento de grandes modelos.
En conjunto, las nuevas instalaciones soportarán una carga crítica de 200 MW en las fases iniciales, lo que permitirá un escalado ordenado de los clústeres de GPUs. Además, la estrategia de refrigeración y diseño de sala busca optimizar el PUE y la estabilidad operativa, aspectos cada vez más relevantes para clientes empresariales en Europa y España.
Financiación y acuerdo con Dell
Para sufragar los gastos de capital, IREN recurrirá a una combinación de efectivo disponible, prepagos de clientes, flujos de caja operativos e iniciativas adicionales de financiación. Esta estructura mixta pretende preservar flexibilidad y robustez financiera durante el despliegue.
En paralelo, la compañía ha cerrado un acuerdo con Dell Technologies por unos 5.800 millones de dólares para adquirir GPUs y equipamiento auxiliar. Este suministro cubrirá componentes críticos del stack (servidores y elementos de red, entre otros) necesarios para entregar la capacidad comprometida con Microsoft.
La coordinación entre el contrato de servicios y la cadena de suministro de hardware reduce riesgos de ejecución y, en teoría, facilita cumplir con los plazos de entrega marcados para 2026. La prioridad es disponer de una base homogénea de equipos que simplifique operaciones y soporte una escalabilidad rápida.
Declaraciones y posicionamiento estratégico
Desde la dirección de IREN se subraya que el acuerdo es un paso relevante en su expansión de despliegues GPU a gran escala dentro de una cartera energética de 3 GW asegurada en Norteamérica. La empresa recalca su modelo verticalmente integrado, que abarca desde los centros de datos hasta la pila de GPU.
Por parte de Microsoft, se destaca la experiencia de IREN en la construcción y operación de nubes de IA totalmente integradas y su acceso estable a energía, factores que convierten a la compañía australiana en un socio estratégico para ampliar la capacidad global de IA de la plataforma.
Aunque el despliegue físico se ubicará en Texas, la capacidad resultante se integrará en la nube de Microsoft y podrá beneficiar a clientes europeos y españoles a través de servicios escalables de entrenamiento e inferencia. Esto es especialmente relevante para sectores intensivos en datos, como banca, salud, industria y administraciones públicas.
Para Europa, el anuncio encaja en una tendencia de externalización de cómputo avanzado a proveedores cloud con grandes reservas de GPU, mientras se combinan estrategias de proximidad y soberanía del dato. Los clientes deberán evaluar ubicación de datos, latencia y cumplimiento normativo al diseñar sus cargas de IA.
El refuerzo de capacidad también podría aliviar parcialmente la escasez de GPUs que ha afectado a proyectos de IA en la región. Aun así, la disponibilidad efectiva dependerá de la planificación de cargas, las ventanas de acceso y la priorización que cada proveedor establezca en su red global.
Contexto: del cripto al cómputo de IA
IREN, con origen en actividades de minería de Bitcoin, ha redirigido su infraestructura y experiencia hacia la provisión de clústeres de GPU para IA. Este giro refleja una transición sectorial más amplia, donde operadores de alto consumo energético buscan capturar la demanda creciente de cómputo acelerado.
El movimiento posiciona a la empresa como un proveedor especializado en infraestructura de alto rendimiento, alineado con el auge de aplicaciones de IA generativa y analítica avanzada. Para Microsoft, el acuerdo suma resiliencia y flexibilidad a su hoja de ruta de infraestructura.
Calendario y próximos pasos
Las primeras fases del plan (Horizonte 1-4) apuntan a habilitar 200 MW de carga crítica conforme se vayan activando los nuevos módulos de data center. El horizonte total del proyecto contempla la puesta en servicio de capacidad adicional hasta el cierre de 2026.
De cara a los clientes, la recomendación es planificar con antelación el consumo de capacidad GPU, ajustar calendarios de entrenamiento y considerar ubicaciones y requisitos de cumplimiento para optimizar costes, latencia y resiliencia.
Con la firma de este contrato y el suministro asociado con Dell, IREN y Microsoft refuerzan su apuesta por una infraestructura de IA de gran escala y alto rendimiento. La combinación de financiación asegurada, despliegue por fases y tecnología de refrigeración líquida establece una base sólida para atender la demanda creciente dentro y fuera de Europa.